jueves, 20 de abril de 2017

Actitudes de un buen CEO o director ejecutivo






Por Raúl Gorrín.- Estar a la cabeza de una organización no es un gran logro para cualquiera, dado que se trata de una posición a la que no todos tienen acceso. Ser el CEO o director ejecutivo de una empresa que requiere de algunas actitudes.

En esta entrega le damos algunos consejos destinados a quienes acceden a tan alta posición empresarial por primera vez.


1. Excelente personalidad.
Para todo CEO o director ejecutivo es sumamente importante el ser una persona única, auténtica, creativa e innovadora. Mantener una actitud proactiva dispuesta a asumir riesgos y a distinguirse del resto.
El CEO o director ejecutivo es una persona con alto ascendente sobre los demás, no en balde, le corresponderá ser guía del resto de miembros de la organización.

2. Ser audaz, osado, sin miedo a dar uno o más pasos adelante. Un buen CEO o director ejecutivo no se queda en el aparato esperando la partida de los otros, sino que toma la iniciativa y sale en pos de sus objetivos.
La audacia del CEO será, no en pocas ocasiones, la que le impulse a dar pasos y hacer movimientos rápidos y claves para su organización.


3. Humildad. La grandeza de los  líderes reposa en su humildad. Sobre todo cuando se trata de quienes dan los primeros pasos como CEO o directores ejecutivos. Deje la arrogancia y la soberbia de lado. Eso no le conducirá a ninguna parte. 
Asumir que se es el recién llegado y observar todo con extrañeza tratando de encontrar el significado a cada cosa, tal vez sea la actitud más prudente.

4. Ser rápido y efectivo. Cuando llegue a su nueva organización, los cambios se deben hacer con velocidad para que sean más eficaces y se perciba un cambio real. 


5. Asumir posición de líder. Eso tienen que sentirlo los demás a su alrededor.
Cuando usted llegue a todos los tiene que uedar claro que llegó el líder de la empresa, la cabeza de la organización.

6. Compromiso. Es indispensable que el Ceo o director ejecutivo se comprometa con la organización y sus valores. Esto es algo que percibirán tanto sus trabajadores como el resto de la plantilla directiva y los clientes. Los demás se sienten confiados cuando están ante alguien comprometido.

7. Valentía. Es imprescindible el valor para adoptar las decisiones que requiere la empresa. 

8. Usted no está solo. El CEO o director ejecutivo sabe que para llevar a cabo su labor cuenta con un equipo de trabajo que le acompaña. La sinergia y la comunicación son fundamentales.



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