lunes, 11 de julio de 2016

Raúl Gorrín: La mejor estrategia de ventas reposa en la confianza y credibilidad

Es común ver negocios que nacen y desaparecen en poco tiempo. ¿La razón? Pocos logran obtener la confianza de unos clientes que cada vez son más exigentes en un mercado que se ha visto invadido muchas veces por innumerables charlatanes. 

No basta con ser diferentes y ofrecer buenos productos y servicios. Es indispensable ser confiables, tener credibilidad, pues el público permanece reacio ante tanta oferta engañosa. 

Captar la atención es ya un activo de incalculable valor, sobre todo ante la avalancha publicitaria a que somos sometidos diariamente.

La confianza es un bien escaso. Internet es una de las maravillas del mundo de hoy, pero también ha sido el vehículo de incontables estafas y fraudes.

Y aunque parezca un absurdo, la gente en la actualidad no quiere que le vendan, ella quiere comprar. Es decir, tomar la decisión, llevar las riendas de las negociaciones. Además, quiere hacerlo en un ambiente confiable.

No afirmamos que las ventas hayan desaparecido, sino que en la actualidad la venta se ha convertido en un arte que va más allá del burdo oficio de ofrecer un producto y que paguen por él  y ya.

Por tanto, las empresas o emprendimientos tienen que generar suficiente confianza para captar una clientela que se sienta segura de lo que compra para seguir comprando. 

Usted le debe demostrarle a su potencial cliente que está dispuesto a ayudarle, que no sólo está interesado en venderle. Hágale entender que tiene deseo de servirle y hacerlo bien, con garantías, con buenas condiciones, de pago y de entrega. Ofreciendo asesoría y, de ser posible, mantenimiento.

En la era digital los productos requieren de mucho valor agregado para poder ser colocados en el mercado.
A usted y a su empresa le toca demostrar en cada venta que conoce las necesidades del cliente, que comprende sus problemas y, además, tiene la solución para ellos.
El departamento de atención al cliente de su empresa debe ser una dirección amigable y siempre dispuesta a la asesoría, a responder a las preguntas del cliente. 
Usted no tiene que tener todas las respuestas, pero sí demostrarle a su cliente que está dispuesto a ayudarlo a buscarla.

Eso sí, cumpla con su palabra, no prometa lo que no puede cumplir. 

Así, que ya lo sabe, su cliente tiene que sentirse seguro con usted porque le ofrece lo que no todos en el mercado están dispuestos ofrecerle: Confianza y credibilidad.


Visita también:

No hay comentarios:

Publicar un comentario