Por Raúl Gorrín. Es común encontrar la presencia de varios competidores que atienden los mismos segmentos en el mercado. Como estrategia de sobrevivencia, las compañías buscan deshacerse de la competencia usando estrategias tradicionales tales como la rebaja de precio o políticas que impulsan la diferenciación a través de la marca. Hay otro tipo de negocios que prefieren enfocarse en el desarrollo de nichos del mercado.
Para evitar que en la pelea con la competencia se diluya la rentabilidad empresarial es fundamental conocer bien contra quién se compite. Si la estrategia es de precio bajo, hay que monitorear los precios para una canasta representativa de productos y mantener una brecha con relación al resto de los oferentes. Si la estrategia es diferenciación, la compañía debe velar porque los clientes perciban ese valor y estén dispuestos a pagar ese diferencial. En cualquier enfoque, la comparación con la competencia está presente.
En algunos escenarios la pelea con la competencia se disminuye si se trabajan aquellos espacios de mercado no aprovechados en los que la empresa puede crear demanda y oportunidades para un crecimiento con una rentabilidad mayor a la de los mercados ya saturados de competidores.
Muchos emprendedores andan en la búsqueda de los espacios no explotados en el mercado, y deciden incursionar en un sector totalmente nuevo o simplemente hacer cambios sustanciales en la estructura tradicional de una industria existente.
Para lograr descubrir esos espacios se requiere estudiar los factores que influyen en la decisión de los consumidores entre industrias adyacentes, considerar segmentos de mercado no atendidos, orientar los esfuerzos de mercadeo a un grupo que tiene un rol diferente en la decisión de compra, estudiar productos relacionados con la ocasión de compra o consumo y apuntar a los sentimientos y emociones. Por ahí van los tiros.
Raúl Gorrín.
Visita también:
SIGUEME..
No hay comentarios:
Publicar un comentario